El próximo jueves, 27 de noviembre, proyectamos
en la Casa Municipal de Cultura, dentro de la programación “Cine con
Otros Ojos”, “De tal padre, tal hijo”, de Hirokazu Kore-Eda, en sesiones
de 6 y 8:30 de la tarde, con la localidad a 3´50 euros.
Adjuntamos
la sinopsis de la película facilitada por la distribuidora, el
comentario de nuestro socio-corresponsal en Canberra, Roger Casas, que
editaremos como ficha, y una reproducción del cartel.
Hasta entonces, un abrazo. Asociación Otrosojos.
SINOPSIS DE LA PELICULA:
Ryoata,
un arquitecto obsesionado por el éxito profesional, vive felizmente con
su esposa y su hijo de seis años, pero su mundo se viene abajo cuando
los responsables del hospital donde nació éste le comunican que, por
confusión, el niño fue cambiado por otro.
COMENTARIO :
La verdad de las cosas pequeñas
¿Cuál
es el factor fundamental en las relaciones humanas? ¿Los lazos de
sangre, o el tiempo que pasamos juntos? Muchos nos hemos hecho alguna
vez esta pregunta, aunque es raro que a uno le suceda lo que a los
protagonistas de esta película, a quienes un buen día se les informa de
que sus hijos varones fueron intercambiados por error en el hospital el
día de su nacimiento, seis años atrás. Hirokazu Koreeda (o Koreeda
Hirokazu, como dicen los nipones), quizás la estrella más rutilante en
el firmamento del cine japonés actual, se apoya en tan inusual coyuntura
para reflexionar sobre cuestiones universales que afectan a la
condición humana, aunque muy en particular, todo hay que decirlo, a la
japonesa, para la que la fuerza de la sangre no es cuestión baladí.
Pero
no se preocupen, que no se trata en este caso de una reflexión pesada
ni pedante, y, gracias sobre todo a los niños, la cosa pasa en un
suspiro. Koreeda es famoso por sus acercamientos al mundo de
la infancia; en los últimos años su visión de la misma se ha hecho más
optimista, y atrás ha quedado la crudeza sin concesiones de Nobody knows (Nadie lo sabe,
2004), historia de un grupo de infantes abandonados a su (mala) suerte
por su madre. Nuestro director es también célebre por sacar lo mejor de
los niños actores – acuérdense de la pareja de hermanos de Kiseki (Milagro, 2011), la anterior película de Koreeda, también proyectada por Otrosojos hace un par de años. Como en Kiseki, resulta difícil resistirse a la espontaneidad y el desparpajo de los críos protagonistas de De tal padre…
Si tanto Nobody knows como Kiseki se centraban en el punto de vista de los niños, De tal padre… lo
abandona para centrarse en el de los padres, y en concreto en la
reacción al error del hospital por parte de dos parejas de trasfondo
social y humoral muy diverso: una que limita el número de vástagos con
el fin de no condicionar sus carreras (en especial la del padre) y de
optimizar las oportunidades del hijo (sin mucho éxito, por lo que
trasluce durante el filme), frente a otra con varios hijos y una actitud
mucho más relajada ante la educación y ante eso tan debatible y esquivo
que es el éxito en la vida.
Pero
aunque los padres son sin duda protagonistas, la clave de esta historia
la ofrece la voluntad inconsciente e inarticulada de uno de los niños,
que, gracias a un precoz interés por la tecnología, provocará una
transformación definitiva en el protagonista (el popular cantante
Masaharu Fukuyama), convertido para entonces en el malo de la película.
Koreeda
se basó en una anécdota sucedida con su propia hija, de la misma edad
que los niños del filme, para idear el desenlace, tan natural y, ¿por
qué no? tan zen, como el fluir de la película, de una perfección
narrativa que sin embargo, y tras la aparente frialdad de los límpidos e
higiénicos paisajes urbanos del Japón post-industrial, logra emocionar
hasta arrancarle a uno las lágrimas. Y eso a pesar también de que el
final resulta abierto y ambiguo, dejando al espectador preguntándose
cuál será la decisión que tomen los padres, una decisión para la que en
cualquier caso ya no podrán dejar de tener en cuenta los sentimientos de
los hijos.
Entre otros certámenes, el año pasado De tal padre… fue
presentada en Cannes, donde obtuvo el Premio Especial del Jurado, y en
el Festival de San Sebastián, donde se llevó el del Público.
Roger Casas